Origen e impacto del voluntariado en el mundo
La necesidad de que exista el voluntariado nace de la propia esencia de una sociedad global marcada por serias desigualdades. Millones de personas se enfrentan cada día a dificultades por falta de recursos, de trabajo, de hogar. O por el hecho de ser víctimas de un conflicto bélico, de una catástrofe natural. O por tener una enfermedad o algún tipo de discapacidad…
Según el ‘Informe sobre el estado del voluntariado en el mundo 2022’ de la ONU, hay más de 862 millones de personas mayores de 15 años en todo el mundo que mensualmente colaboran como voluntarios. Afortunadamente siempre han existido personas que ayudan a otras, un voluntariado informal. Pero cuando hablamos de voluntariado desde el Tercer Sector nos referimos a una ayuda estructurada en el marco de una organización.
Conexión con la esencia y la existencia de las ONG
El voluntariado ha estado históricamente vinculado a las ONG, y su esencia es la que ha hecho nacer a muchas de ellas. De un tiempo para acá, la tendencia apunta hacia la profesionalización de las entidades no lucrativas, pero eso no implica ni mucho menos que pudieran funcionar sin sus voluntarios. Tomemos como muestra las ONG Acreditadas con el sello Dona con Confianza: los voluntarios representan, de media, el 56% de los recursos humanos totales. Es decir, sigue habiendo más voluntarios que empleados.
Las ONG facilitan a las personas generosas la posibilidad de encontrar una causa con la que colaborar. Es más sencillo acercarte a un colectivo que necesita ayuda a través de su estructura que hacerlo por tu cuenta. Y eso consigue que exista un mayor número de voluntarios. Dentro de las organizaciones, estos pueden realizar labores ejecutivas y de gestión, y también vinculadas a las acciones que dan forma a su misión.
Actividades de acción directa y también de gestión
Así, entre las 276 ONG Acreditadas, el 55% cuenta con voluntarios que acompañan a los beneficiarios en actividades de ocio. En el 49% sus voluntarios realizan actividades administrativas. Con un 34%, están las ONG cuyos voluntarios se encargan de labores de formación a beneficiarios y, con el mismo porcentaje, de captación de fondos como organización de eventos o participación en la Gran Recogida de los Bancos de Alimentos. Otras acciones que realizan los voluntarios son el acompañamiento a beneficiarios, las labores de gerencia, la sensibilización, la comunicación o los viajes a terreno en las organizaciones de cooperación al desarrollo.
En muchas ONG, los miembros del órgano de gobierno también se ponen la “gorra de voluntario”. Es decir, además de sus responsabilidades en patronatos o juntas directivas que no son remuneradas, colaboran con la organización en su quehacer diario. De hecho, más del 35% de las ONG Acreditadas cuentan con patronos o miembros de juntas que realizan labores de voluntariado en diferentes áreas de la organización.
Ejemplos destacados de ONG que “respiran voluntariado”
Existen algunos casos especialmente significativos de entidades en los que los voluntarios son su piedra angular. Por ejemplo, los puestos de responsabilidad de una ONG de cooperación al desarrollo tan reconocida como Manos Unidas se cubren con voluntarios. Los Bancos de Alimentos cuentan con un altísimo número de voluntarios y muy poco empleados. Bokatas, que se dedica al acompañamiento de personas sin hogar, no tiene personal remunerado, toda su actividad de dirección, gestión y ejecución la realizan voluntariados. Y en COEM (Cirujanos Ortopédicos de España para el Mundo), que organiza misiones médicas a Camerún para realizar cirugías ortopédicas y traumatológicas, tampoco hay personas en plantilla, todos son voluntarios.
Una actividad regulada por Ley desde 1998
La actividad de voluntariado en España está regulada por ley desde el año 1996. Pero ante el aumento de las dimensiones de la acción voluntaria, en 2015 se vio la necesidad de modificar el marco jurídico. La Ley 45/2015 de Voluntariado recoge los requisitos que una persona debe reunir para considerarse voluntaria, las incompatibilidades y también sus derechos. También hay leyes de voluntariado a nivel autonómico.
Según esta normativa, el voluntariado es el conjunto de actividades desarrolladas por personas físicas para mejorar la vida de otras personas, la sociedad o el entorno. Han de tener carácter solidario, realizarse de forma totalmente libre y no llevar implícito ningún tipo de contraprestación. Y han de desarrollarse a través de programas concretos o entidades de voluntariado.
Derechos y también obligaciones
Los derechos de los voluntarios son, al mismo tiempo, los deberes u obligaciones que han de cumplir las ONG a las que se vincula su actividad. Entre ellos, proporcionarles los medios materiales para poder realizar las funciones asignadas. Muy importante, protegerles con un seguro frente a posibles accidentes y enfermedades derivadas del ejercicio del voluntariado, y con cobertura de responsabilidad civil. Reembolsarles los gastos en los que incurran en su desempeño. Entre las obligaciones para las ONG también se incluyen formalizar un acuerdo de incorporación en el que se indica derechos y deberes de ambas partes, descripción de funciones y tiempo de dedicación, formación requerida y duración del compromiso. Además, las ONG deben solicitar a los voluntarios una declaración responsable de no tener antecedentes penales por delitos como violencia de género, tráfico ilegal, terrorismo, etc. y a los voluntarios que realicen actividades con menores, un certificado de delitos de naturaleza sexual negativo.
Por otra parte, que exista un manual de acogida en el que el voluntario encuentre toda la información necesaria para realizar su actividad es altamente recomendable. Y la ONG debe llevar un registro de voluntarios, con las altas y bajas, tratando sus datos personales de acuerdo con la normativa de protección de datos.
Algunas recomendaciones antes de hacerse voluntario
Entre los 9 Principios de Transparencia y Buenas Prácticas hay uno específico relativo al voluntariado: “El principio 8: Voluntariado formado y participativo”. Por tanto, para conseguir el sello Dona con Confianza también es imprescindible llevar a cabo una adecuada gestión con los voluntarios.
Por eso, si estás pensando en colaborar como voluntario, una buena manera de hacerlo es seleccionar una ONG Acreditada. A través del buscador avanzado de entidades de nuestra web puedes filtrar por tipos de actividades, colectivos, áreas geográficas…
Es importante seleccionar una causa que conecte con tus inquietudes y capacidades, pero también es fundamental reflexionar sobre el compromiso que uno adquiere cuando se inicia en esta actividad. Para dar ese paso, hay que estar seguro de tener la disponibilidad necesaria para asumir la implicación que requiere.
Si después de todo esto lo tienes claro, tienes ante ti un amplio abanico de posibilidades para ayudar a otras personas. En Navidad, en verano, o todo el año. En función del tiempo de que dispongas podrás encontrar algo a tu medida. Podrás ser una de los 3,3 millones de personas mayores de 14 años que, según la Plataforma del Voluntariado de España, cumplen esta importantísima función y contribuir a un mundo mejor a través del voluntariado.
